Carteles de la Guerra Civil Española: Buentaventura Durruti, prosigamos su obra (6/110)
Vemos en esta lámina la efigie de Durruti, el más conocido de los dirigentes anarquistas de la guerra civil. Sobre un fondo con la bandera rojinegra de la CNT-FAI, se nos muestra a un Durruti vestido al estilo de jefe de milicias revolucionarias, con su peculiar chaqueta de cuero y con los prismáticos: el hombre de la acción directa anarquista se ha metamorfoseado en ordenado y marcial jefe militar. Buenaventura Durruti había nacido en León el 14 de julio de 1896, en el seno de una familia obrera de origen paterno vasco-francés, y materno catalán. Trabajó de metalúrgico, y militó en el sindicato afiliado a la UGT.
A raíz de la huelga de 1917, y como desertor del ejército, se exilió a Francia. Vuelto a España, se afilió a la CNT. En San Sebastián se relacionó con el dirigente anarquista Manuel Buenacasa y participó en actividades terroristas. En Barcelona hizo amistad con Francisco Ascaso, con quien compartió una accidentada vida de hombre de acción (atentados, atracos), con la finalidad de vengar a los caídos anarquistas y, al mismo tiempo, de recoger fondos para las actividades de su organización. Una vez proclamada la República, fue portavoz de la corriente radical faísta (a pesar de que, de hecho, no ingresó en ¡a FAI hasta más tarde). Formó parte de los comités insurreccionales anarquistas de enero y diciembre de 1933, y combatió en las calles de Barcelona, al frente de los grupos de defensa confederal, el 19 de julio de 1936. El Comité Central de Milicias Antifascistas le hizo responsable de la primera columna que salió de Barcelona para la conquista de Zaragoza. Después de impulsar, en Aragón, la colectivización agraria, le convencieron de la necesidad de ayudar al Madrid cercado, tanto para coadyuvar a la defensa de la ciudad como para potenciar el papel de los anarquistas en la capital del estado. Murió en el frente de Madrid, en la Ciudad Universitaria, el 19 de noviembre de 1936, sin que se hayan aclarado todavía las circunstancias de su muerte (accidente fortuito, disparo enemigo, ajuste de cuentas anarquista o asesinado por los comunistas), aunque la versión últimamente más aceptada considera que fue víctima fortuita de su propia metralleta, hecho que fue piadosamente camuflado para no destruir el mito de héroe de la guerra, que entonces se estaba conformando.
Detalles técnicos del cartel:
Autor, Cervera (CNT-FAI). Barcelona. Medidas, 68 X 48 cm. (Col. J. Termes.)
Fuente: “Carteles de la Guerra Civil Española”, Ediciones Urbión, S.A. 1981.